Al norte
de la provincia de Huelva se extiende el Parque Natural de la
Sierra de Aracena y Picos de Aroche, un espacio protegido de lo más
tranquilo y acogedor con rincones que merece la pena descubrir. Su riqueza
va más allá de lo estrictamente ambiental ya que abarca un importante
patrimonio cultural y gastronómico presente en todos sus pueblos. Estas
sierras forman parte de la cordillera de Sierra Morena, que comprende las
provincias andaluzas de Jaén, Córdoba, Sevilla y Huelva, y se prolonga hasta Portugal. En
su extremo occidental, es decir la zona de Huelva, presenta un relieve menos
elevado y un paisaje de suaves colinas, bosque mediterráneo y dehesas.
Es uno
de los parques naturales que cuenta con más caminos de uso público de
Andalucía, así que la oferta para practicar senderismo es de lo más variada.
Una de las mejores propuestas es la ruta del Bosque Encantado, un recorrido
circular de casi 15 km que parte de la localidad de Fuenteheridos y atraviesa
diferentes ecosistemas como zonas de bosque mixto, castañares centenarios y
algunas de las dehesas mejor conservadas de España.
En
nuestro viaje al interior de Huelva, en las navidades de 2018, elegimos Fuenteheridos
como campo base para desplazarnos a otros pueblos y empaparnos de los
encantos de la sierra onubense. Es un municipio apacible de menos de mil
habitantes, con un casco urbano bien conservado declarado Conjunto
Histórico-Artístico y Bien de Interés Cultural. Entre sus monumentos
destaca la Iglesia Parroquial del Espíritu Santo, con un llamativo campanario
de azulejos blancos y azules que sobresale entre las tradicionales casas
serranas.
En esta
época sus calles se engalanan con curiosos adornos navideños que aportan
colorido a los oscuros días invernales.
La plaza
de El Coso es el centro social del pueblo, con restaurantes y tiendas que
ofrecen sus productos más típicos: setas, castañas, miel y los derivados del
cerdo ibérico. Aquí se encuentra la Fuente de los Doce Caños,
construida sobre un manantial muy abundante que es considerado el nacimiento
del río Múrtigas. De estos caños brota una ingente cantidad de agua, se calcula
que unos dos millones de litros diarios, que es usada para abastecer a
toda la población y regar las huertas cercanas.
Para
empezar la ruta hay que dirigirse hacia la parte alta del pueblo hasta llegar a
su cementerio, justo detrás de las últimas casas.
A un
lado hay un pequeño oratorio de tipo neoclásico llamado Humilladero de la
Verónica, y a partir de ahí seguimos las indicaciones para tomar el camino
viejo que une Fuenteheridos con el cercano pueblo de Galaroza.
El
sendero se halla bien conservado y es apto para toda la familia. En apenas unos
metros se adentra en un encantador bosque de frondosa vegetación en el que
reina la tranquilidad y el silencio, es el "Bosque Encantado".
Su época
de máximo esplendor es sin duda el otoño, pero cualquier momento será bueno
para disfrutar de un agradable paseo entre castaños, encinas, robles,
quejigos y alcornoques.
Llegamos
al barranco del Aliso y cruzamos el arroyo de la Nogalera en un punto en el que
aparece la vegetación de ribera.
El
camino discurre por el GR-43.1, que tiene algunos tramos empedrados y viejos muros de piedra.
Más
adelante toca cruzar el río Múrtigas, cuyas aguas se unen al río Ardila para
acabar desembocando en el Guadiana ya en tierras portuguesas.
Continuamos en dirección a la finca La Suerte siguiendo las señales y, tras cruzar una carretera, llegamos a la población de Galaroza.
En el
barrio alto continúa el itinerario tomando el camino de Valdelarco, esta vez en
sentido ascendente.
A lo
lejos se aprecia el famoso pueblo de Jabugo que da nombre a una de las grandes
denominaciones de origen de estas sierras: el jamón de Jabugo.
Por el
camino nos topamos con algunos de estos animales tan apreciados, los cuales
campan a sus anchas por la dehesa comiendo bellotas y gozando de una vida
medianamente feliz hasta su trágico final.
Seguimos
la marcha hasta el Área Recreativa El Talenque, buen lugar para almorzar y
descansar rodeados de naturaleza.
La ruta
continúa después en medio de un paisaje de dehesa, por un camino tranquilo con
muretes cubiertos de musgo.
Un burro
muy tierno viene a nuestro encuentro y nos sigue desde dentro de su finca hasta
que nos pierde de vista, me da que se siente muy solo.
Al salir
del camino giramos a la izquierda y recorremos algunos metros por una carretera
hasta enlazar con una pista que lleva al Cortijo Valle de la Carrera. Desde
allí nos desviamos hacia la derecha por otro camino que discurre entre huertas
y diminutas aldeas hasta llegar de nuevo a Fuenteheridos. Es recomendable seguir el track que he dejado abajo para no perderse en
los múltiples desvíos que tiene esta ruta.
A sólo
un kilómetro del pueblo está el complejo turístico de Villa Onuba, con unos
jardines de estilo francés que recomiendo visitar ya que poseen una gran
variedad de especies botánicas de todos los continentes, incluyendo Cedros
del Himalaya, Pinsapos y hasta Secuoyas. Es una propiedad privada pero pidiendo permiso a los dueños se puede visitar sin problema.
Y
mención aparte merece nuestro alojamiento para estos días en Fuenteheridos, el Hotel Biarritz, un conjunto de casitas rurales que conservan su esencia de
antaño, con chimenea y leña gratis de buena calidad, y todo el equipamiento
necesario para hacer muy confortable la estancia.
Y encima
nos han permitido alojarnos en familia, con nuestro perro y nuestro gato, que
han disfrutado de lo lindo cada uno a su manera.
Y por la
noche no hay nada mejor que recrearse junto a una buena candela, ¡hasta la
próxima rutilla!
Aquí tenéis el track: https://es.wikiloc.com/rutas-senderismo/fuenteheridos-a-galaroza-circular-el-bosque-encantado-31434996
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